domingo, 30 de noviembre de 2008

MAMA QUERIDA


Es difícil de explicar
Mi sentir cuando te miro
Recordándote mamá,
siempre me guardo un suspiro
porque al mirarte recuerdo
todo lo que tú habías sido
y es tan injusta la vida
como pasa sin sentido
y verte postrada aquí
esperando en el vacío
que Dios se acuerde de ti
y si se acuerda mamá,
es más injusto, lo digo
porque entonces ya no estás
y no tenerte conmigo
más difícil me será
aunque en mi mente estarás
eso también te lo digo.

viernes, 28 de noviembre de 2008

ALBERTO PALACIOS



Alberto Palacios calle, que no paseo, casi llegando a la estación, al pasar por allí, como tantas veces hago, en los últimos tiempos, y ver el balcón de tu casa, me traslade al pasado, y pude vernos a ti, a mi, allí en tu casa, y a tu madre, en tu comedor, tu mueble, esa mesa chiquita de centro toda rallada por tus hermanos, y la lámpara de pie, al lado del sofá, con la mesa incorporada de plástico imitando al mármol, el cenicero, y tu limpiando y rompiendo esas figuras que tan poco te gustaban, tu madre con los ojos fijos en mi, sonriendo y diciéndome: “ porque será que mi hija solo rompe cosas cuando tu le ayuda a limpiar”.Te recuerdo amiga, siempre defendiéndome como si yo fuera algo tan frágil y débil a quien defender, y tu tan poquita cosa, siempre tan entera, firme, completa.Pero tengo un recuerdo tuyo inolvidable, llorando, desvalida, cuando sabias que ella se moría, era como si el bastón que te sostenía se resquebrajara día a día y perdieras tu fuerza, ¿era ella quien te daba la valentía? ¿Esa entereza de la que hacías gala?

Y ella en su dormitorio de forja, con sus mesitas de roble, herencia de su abuela, (siempre nos lo decía), la luz de las lámparas de cobre, en penumbra. Estaba tan amarilla, delgada, débil, frágil, con su cara desencajada por el dolor, que en los últimos tiempos, dejo de molestarse en fingir que no tenia, cuando con ese hilo de voz, me dijo: trae a tu madre antes de que me muera, me gustaría verla, cuida de mi niña, será la que mas lo necesite, los demás tienen su vida, ella no, solo a vivido, por y para mi, yo se que tu eres fuerte, mas que ella, aunque ella siempre pensó lo contrario, ella solo tiene la valentía del soldado, que no sabe que le espera en el campo de batalla. Tu en cambio, siempre sabes donde vas, que te espera, y a que te enfrentas, aun sabiéndolo continuas de frente sin detenerte, te admiro pequeña, siempre te admire y nunca te lo dije. Estaba demasiado ocupada teniendo celos, porque mi hija compartía contigo el tiempo que antes era solo mió.


Gracias porque siempre has estado a su lado, y en muchas ocasiones te necesito de veras.Para ese momento yo lloraba, ella no tenia fuerzas ni para llorar.Entonces nos abrazamos, yo la bese.En ese momento me di cuenta que nunca la había besado, y es que siempre la vi tan negada al cariño, tan dura, que no pensé que quisiera.

Me fui llorando, no volví a verla.El día de su entierro no se hizo tardar, enseguida le vino el descanso eterno, que ella agradeció, sin lugar a la duda y vosotras también, ya no podíais soportar verla sufrir.


Nosotras, hasta hoy somos las mismas.

¿QUÉ HAY TRAS EL SILENCIO?


Cuando miro y me callo
Y tu quieres saberlo
Tu mirada interroga
Que hay tras el silencio
Tras el silencio hay
La duda y el desvelo
Las noches sin dormir
Y el temor a perderlo
A perder estas tardes
Y que pierda tus besos
Que me besos la frente
Y que estreches mi cuerpo
A sentirte dormir
Y a todo esto que es nuestro
Tras el silencio hay
Tristeza y desconsuelo
A pensar que mañana
No tenga todo esto
Pero ahora me tienes
Y siento que te tengo
Ya veremos mañana
Lo que nos va trayendo
Mientras tanto habrá tardes
De dudas y silencio

ADENTRADO EN MI PIEL


No te pude imaginar tan adentrado en mi piel;
tan bien en mis entrañas… situado,
te adheriste a mi alma, y eres parte de ella;
estas aquí, te siento cada instante;
no solo es el recuerdo de tu ausencia.

Eres tu, mi dueño, amante, amigo mió…
pero aun sabiendo del dolor,
que me producirá tu falta,
decido separar de mí,
toda evidencia de este amor,
que sin compasión un día nos mezclara.

Y como el cirujano que separa neonatos,
unidos por un mismo corazón y su cordón,
así tendré que hacerlo… sin clemencia;
sabiendo que los dos no viviremos,
y uno… morirá seguro en el intento.

Entonces derrochare toneladas de amargura,
y dejando parte de mi vida en el propósito,
remendare las heridas que acusara,
con jirones de piel que ya guardaba.

Pues sabes bien que yo he vivido algunos años,
viéndome resquebrajar, y que no es poco,
ahogare los recuerdos que me queden,
en el pozo de mi alma abandonada,
y la frazada del olvido,
cubrirá la cicatriz,
que separarte de mi cuerpo ha producido.

NUNCA SE OLVIDA A UN AMIGO


Triste siento ya la noche
La pena embarga el ambiente
Y esa tristeza no es otra
Que despedirse en la muerte.

Si un amigo se nos marcha
Decir adiós no es tan fácil
Pues un peso se nos posa
No deja pasar el aire.

Cuando es adiós sin retorno
Si para siempre se duerme
Entonces pasan los días
Y el recuerdo se nos viene.

A veces nos enfadamos
Por marcharse de esa forma
Otras también le lloramos
Y siempre le recordamos
No se olvida a las personas.

Al compartir los momentos
Buenos y malos que hubo
No se olvida a los amigos
Pues siempre dejan vacío.

¿HOJARASCA?


Las hojas secas del otoño,
alimentan la tierra y dan calor.
Y preparan a ese árbol,
que el invierno con su fuerza recibió.
Mas no olvides que la primavera,
siempre del invierno va detrás.
Y con ella llegan nuevos despertares,
Que incitan a los cuerpos para amar.


Desnúdate por Dios de esa tristeza,
y no esperes eso que nos queda por llegar.
No apagues las lunas, muchachita,
más bien a su paso enciéndelas.
Que tú eres lumbre que calienta,
y que pasiones en tu vida encenderás.
Cuando veas a la luna reflejada,
sobre el agua, siéntete feliz.
Pues salio a tu paso, para verte,
ese día su esplendor es para ti.

Sumérgete y renace a otros presagios,
deja la soledad que se marchite,
olvida la nostalgia y el dolor,
dale la espalda a ese destino,
agarra de la mano esa… tu fe,
remordimiento y desamor,
ponlos a un lado,
y haz el camino andando,
como dijo aquel.

Aunque doradas y ajadas,
veas las hojas.
Dorado el oro es. ¿Y que valor?
que los años no los pone,
Nuestra vida, es la mente,
la que pone el corazón.
Así que sueña… y que nadie te lo quite,
que los sueños no nos los pueden robar,
y un amor renacerá un día en tu vida,
ese día de la lluvia y del olvido te reirás.